El problema que observan los productores es que no hay un mercado regido por la oferta y la demanda, ya que aseguran que las empresas forman el precio del mercado. “Se ponen de acuerdo en el precio que quieren pagar y se acabó”, aseguró Alberto Gallardo, productor viñatero e integrante de la Mesa Vitícola de San Juan.
Atento a esta situación, el gobierno sanjuanino intentó intervenir, pero hasta ahora no obtuvo respuesta. “El gobierno provincial nos ha tratado de ayudar, pero ellos también son rehenes; la situación del mercado es tan grave que el gobierno está atado de pies y manos y para conseguirlo tendría que expropiar una empresa, por ejemplo”, explicó.
La gran mayoría de la uva de San Juan se destina para la elaboración de vinos comunes, de caja o el vino concentrado que se exporta. Este producto lo fabrican Fecovita y Enav, que también se suman a las otras formadoras de precios y juntas estiman lo que quieren pagar por la producción. Según comentaron los productores, en la actualidad hay cuatro empresas que concentran el 70% de las ventas de la uva sanjuanina.