Las cadenas agroindustriales crean 3,7 millones de puestos de trabajo, tanto en el campo como en rubros urbanos.

Este estudio indicó que el 24% del empleo privado nacional viene de la agroindustria. «Cuando pensamos en el empleo agro sólo nos imaginamos productores, agrónomos, veterinarios y trabajadores del campo, produciendo trigo, tomate, limón o criando un ternero, pero va más allá de eso, genera empleos en múltiples rubros urbanos como administrativos, comerciantes, personal de ingeniería, tecnología, investigación, mantenimiento, limpieza, y una rueda interminable de puestos que se multiplican a lo largo de todas las cadenas», revela Natalia Ariño, economista de FADA.

Este estudio indicó que el 24% del empleo privado nacional viene de la agroindustria. «Cuando pensamos en el empleo agro sólo nos imaginamos productores, agrónomos, veterinarios y trabajadores del campo, produciendo trigo, tomate, limón o criando un ternero, pero va más allá de eso, genera empleos en múltiples rubros urbanos como administrativos, comerciantes, personal de ingeniería, tecnología, investigación, mantenimiento, limpieza, y una rueda interminable de puestos que se multiplican a lo largo de todas las cadenas», revela Ariño.

Analizando por cadenas, vemos que el 31% de los empleos se concentran en las economías regionales (azúcar, frutas, vino, etc.), el 30% las cadenas de granos y forrajeras, 24% cadenas animales(vacuno, porcino, aviar, láctea, ovino y otros), los servicios conexos y otras actividades suman 14%(financieros, seguros, contables, etc.)y 1% bienes de capital(maquinarias). Entre todos esos sectores, millones de familias tienen la posibilidad de acceder al empleo gracias a las cadenas agro, que en conjunto dinamizan gran parte de la producción de nuestro país.

«Tenemos que entender todos, como sociedad, que «el campo» no sólo es sembrar o criar animales. Involucra a millones de personas desde los que trabajan la tierra hasta los que están en una oficina en la ciudad. Es el que pone la semilla, pero también todo el desarrollo científico que hay detrás, las maquinarias, los que fabrican los insumos, los que transportan, los que administran, los comerciantes, los industriales», expone Ariño. «Con este estudio buscamos mostrar todo el potencial que tiene el sector para crecer y encarar el triple desafío de aumentar la producción, el empleo y la generación de divisas, minimizando el impacto ambiental y optimizando la inocuidad y calidad de sus productos», concluyen desde FADA.