Miles de productores agropecuarios alemanas sacaron a la calle sus tractores en 17 ciudades en protesta por las nuevas políticas ambientales del gobierno de Angela Merkel que, según ellos, les imponen serias restricciones para trabajar.
Largas filas de tractores se vieron en las calles de Berlín, Bonn, Hannover, Munich y otras ciudades en contra de un paquete de medidas que incluye la prohibición progresiva del herbicida glifosato para 2023 y límites para el uso de fertilizantes en la ganadería.
Ese programa fue acordado por la ministra de Agricultura Julia Klöckner, del partido CPU (democracia cristiana) y la ministra de Medio Ambiente, Svenja Schulze, del SPD (socialdemócrata). No obstante, Klöckner respaldó la protesta de los productores. «Hacen la comida que comemos, trabajan duro, pero algunos los ven como ‘contaminadores’ o ‘abusadores de animales’. Y eso no es correcto ni justo», dijo al diario Bild.
Las protestas en Alemania fueron organizadas por el movimiento «Land schafft Verbindung» (el campo crea conexión) y en las últimas semanas hubo acciones similares en Holanda y en Francia.
El gobierno alemán, bajo presión de la UE, también se propone reducir el contenido de nitrato en aguas subterráneas mediante un menor uso de fertilizantes. Bruselas advirtió a Alemania por exceder los niveles permitidos de nitratos en las aguas subterráneas, debido a la ganadería intensiva. Sin embargo, los productores alemanes dicen que eso se debe a exceso de fertilizantes usados en el pasado.