La pandemia del coronavirus ya está provocando un efecto negativo en los precios internacionales de los granos y que a su vez afectan a los valores del mercado local.

En este contexto la soja es la más complicada, ya que a los menores precios se suman menores rendimientos y producción a cosechar por la falta de precipitaciones, y una mayor presión impositiva, de la mano del nuevo aumento de las retenciones a las exportaciones del poroto y sus derivados.

En su informe mensual, los consultores Teo Zorraquín y Alejandro Meneses aseguraron que se aguarda el impacto que tendrán las últimas medidas para contener el contagio del coronavirus, y manifestaron: “La lógica indica que veremos una fuerte caída en el nivel de actividad, y en un escenario de algunos precios reprimidos por los controles y el congelamiento de algunas tarifas públicas”.

Agregaron: “Nadie preveía y tampoco se puede pronosticar dónde termina el impacto de la pandemia en cualquier mercado. Asistimos a todos los efectos que alguna vez estudiamos o leímos: ‘Cisne negro’, ‘Efecto aleteo de Mariposa’, ‘Hiperconectividad del mundo’, ‘Globalización’”.

Por otro lado, el analista y ex Sscretario de Agregado de Valor de la Nación, Néstor Roulet, elaboró un documento titulado “¿Quién gana y quién pierde con la baja del valor de la soja?”.

En el mismo, Roulet aseguró que el productor de soja en agosto pasado tomó la decisión de siembra con una ganancia que se proyectaba en USD 84,94 por hectárea. Tras ocho meses de esa decisión, se encuentra actualmente con un quebranto de USD 117,92 por hectárea.

Para el analista, “todo esto se debe básicamente al diferencial de rendimiento entre lo proyectado y lo real por los efectos de la falta de precipitaciones, a la baja del precio internacional de la oleaginosa que pasó de USD 333,27 a USD 302 por tonelada, y al aumento de las retenciones y de los impuestos provinciales, como Inmobiliario Rural e Ingresos Brutos, y Municipales, mediante la Tasa de Red Vial”.

Y con este panorama, para Roulet “el que gana es el Estado tanto nacional, provincial y municipal. El Estado nacional a pesar de la baja del valor de la soja por el aumento del 30% de las retenciones, que pasó del 24,7% al 33%, va a recaudar USD 32,53 USD extras por hectárea. Es increíble que a pesar de que el productor pierde USD 117,92 por hectárea, igual tiene que tributar USD 328,87 por hectárea de retenciones”.