El presidente de la Coordinadora de las Industrias de Productos Alimenticios (Copal), Daniel Funes de Rioja, se mostró de acuerdo con la iniciativa, luego de la presentación del programa de Alberto Fernández.

El presidente de la Coordinadora de las Industrias de Productos Alimenticios (Copal), Daniel Funes de Rioja, destacó que Alberto Fernández haya comenzado a buscar ya «políticas de Estado», aun cuando todavía es candidato y faltan las elecciones generales.

Funes de Rioja se mostró de acuerdo con que las empresas donen el 1% de su producción para combatir el hambre en el país si se desarrolla un plan de expansión del consumo interno y de las exportaciones industriales.

El candidato presidencial del Frente de Todos anunció este lunes los lineamientos de la convocatoria «Argentina Contra el Hambre», en un acto en la Facultad de Agronomía, con presencia de líderes empresarios, de opinión pública, sindicales y a las organizaciones sociales y religiosas.

«La Argentina necesita consensos básicos para políticas de Estado. Acá hay cuestiones estructurales que hay que discutir para implementar. Tienen que ser consensos de la política más allá de quien gane las elecciones. Me parece importante que candidatos como Alberto Fernández la estén llevando adelante», dijo.

El empresario se refirió a la propuesta del Frente de Todos que está llevando adelante el diputado nacional y eventual ministro de Desarrollo Social,Daniel Arroyo, para la puesta en marcha de un plan contra el hambre.

La comisión directiva de la Copal se reunirá con Arroyo el jueves y según dijo Funes de Rioja, los empresarios están abiertos a dialogar si se pone en el centro del debate al consumo interno y al fomento de exportaciones.

«Esta es una industria fuertemente exportadora. Se llegaron a exportar alimentos industrializados por más de 30.000 millones de dólares y hoy se exportan por 25.000 millones, afectando fundamentalmente economías regionales. No estoy hablando de commodities sino de alimentos», dijo.

Consideró el industrial que «hay espacios de trabajo en común» para buscar promover e incentivar el consumo y darle previsibilidad y rentabilidad a las empresas, impulsando al mercado interno para que se potencie la capacidad instalada para poder exportar más.

«Hay un tremendo grado de informalidad en la economía argentina. Eso también preocupa porque es competencia desleal. Todo esto lo vamos a poner sobre la mesa en pos del diálogo que sea necesario», dijo Funes de Rioja en diálogo con Futurock.