La utilización de warrants alcanzó niveles históricos en los primeros diez meses del año, impulsada por la simplificación normativa establecida en el DNU 70/2023. Según informó la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca, este instrumento financiero —que permite obtener crédito utilizando mercadería como garantía— registró un salto interanual del 102% en dólares y del 69% en pesos.
Entre enero y octubre se emitieron warrants por USD 1960 millones y $159.161 millones, frente a los USD 965 millones y $94.188 millones del mismo período de 2024. De esta manera, los valores acumulados en 2025 ya superan el total emitido durante todo el año pasado.
El organismo que conduce Sergio Iraeta destacó que los warrants se consolidan como “una herramienta ágil y eficiente para el sector agroindustrial y las economías regionales”, al facilitar el acceso al financiamiento sobre una base tangible: la mercadería almacenada.
Los warrants emitidos hasta ahora abarcan una amplia diversidad de productos y se encuentran distribuidos en 18 provincias. La herramienta es utilizada en sectores como cereales, oleaginosas —granos, aceites y harinas—, azúcar, fertilizantes, tabaco, ganado en pie, jugo de limón, leche en polvo y cáscara deshidratada, entre otros. La ganadería figura entre las actividades que más recurren a este mecanismo.
El crecimiento se explica, en parte, por las modificaciones introducidas al régimen mediante el DNU 70/2023 y su Decreto Reglamentario 640/2024. Ambos actualizaron la Ley 9643 y permitieron flexibilizar la operatoria, incorporar nuevos productos y habilitar el uso digital del warrant y del certificado de depósito a través de plataformas oficiales y privadas.
Como parte de la difusión de la herramienta, la Secretaría llevó adelante un webinar con la participación de más de 150 empresas y entidades de todo el país interesadas en conocer su funcionamiento y alcances.
Con una demanda en expansión y una regulación más ágil, el warrant se afianza como una de las alternativas de financiamiento más dinámicas del año para el agro argentino.















