Así lo determinó el último balance de oferta y demanda interna de trigo argentino 2019/20 publicado por la corredora de granos Kimei Cereales.

A la fecha restan ingresar al mercado argentino un volumen de 6,21 millones de toneladas de trigo, una cifra más que suficiente para abastecer a la industria molinera hasta el ingreso de la próxima cosecha en noviembre de 2020.

Luego de registrar un máximo de 214,0 u$s/tonelada el pasado 23 de enero, el valor del contrato Trigo Rosario Marzo 2020 del Matba Rofex comenzó a bajar a partir del compromiso del sector exportador, asumido ante el gobierno de Alberto Fernández, de vender trigo en el mercado interno para abastecer a un sector de la industria molinera que no pudo planificar compras con una gestión profesional.

Posteriormente los valores comenzaron a enfriarse ante el surgimiento de rumores sobre la eventual aplicación de una intervención del comercio exterior del cereal, los cuales fueron confirmados el jueves pasado por el secretario de Agricultura, Julián Echazarreta, durante una exposición realizada en un evento público.

El contrato Trigo Rosario Marzo 2020 –correspondiente a 100 toneladas del cereal condición cámara destinado a exportación– cerró ayer lunes en 202,7 u$s/tonelada, un valor que, considerado el FOB oficial de 245 u$s/tonelada determinado por el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, contiene un derecho de exportación efectivo del 13,4% cuando la retención vigente en cereales es del 12,0%.

El contrato Trigo Rosario Julio 2020, con un precio de cierre de 207,1 u$s/tonelada y un FOB oficial de 258 u$s/tonelada, tiene un derecho de exportación efectivo del 16%.

La mayor parte del trigo 2019/20 no comercializado sigue en manos de productores bonaerenses que cuentan con partidas de buena calidad panadera y no tienen ningún apuro por desprenderse de su mercadería ante condiciones que no consideren adecuadas.