Este año el campo aportó una cosecha récord histórica y en dólares significó un 34% más que la campaña previa. Las previsiones para 2020, según la Bolsa de Cereales de Buenos Aires son inferiores a lo sucedido este año.

Según el gerente de Estudios Económicos de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, Agustín Tejeda, el Producto Bruto Agropecuario (PBA) que aportaron las seis principales cadenas agrícolas (soja, maíz, trigo, sorgo, girasol y cebada), alcanzó los 33.500 millones de dólares en la última campaña.

Esto significa 8.500 millones de dólares o un 34% más que los 25.000 millones de dólares del ciclo 2017/18, que sufrió la mayor sequía en 50 años.

“Desde la campaña 2015/16, el crecimiento del agro fue del 16%, liderado por el trigo y el maíz. Eso fue en sólo cuatro campañas, contra una economía que estuvo estancada”, indicó Tejeda.

Y destacó el rol protagónico que tiene particularmente este año: con un crecimiento del 1,6 por ciento en su producto bruto, evita que la caída de la economía, del 2,5 por ciento, sea superior. “Sin el agro, caería 4,1% en 2019”, remarcó.

También sobresale el aporte al fisco: 11.500 millones de dólares, 40% (3.240 millones) más que en 2018. Y las exportaciones se estiman en un récord de 28.700 millones de dólares para el corriente ejercicio.

Las previsiones para 2020 del sector agrícola no son malas, pero sí son inferiores a lo sucedido este año, en el que se vivió una campaña extraordinaria gracias a lluvias que cayeron en las cantidades y momentos justos.

La Bolsa porteña estima que la cosecha total argentina se retraerá de poco más de 135 millones de toneladas a menos de 132 millones, producto de que la perspectiva climática es de lluvias normales y no abundantes como las del ciclo pasado, que llevaron a los rindes a niveles que nadie presagiaba.

Esto se combinará con un horizonte de precios internacionales inferiores a los que dominaron durante la temporada 2018/19.

Así, el Producto Bruto Agropecuario caería en 6,8% o 2.280 millones de dólares, lo que implicará perder un ocho por ciento de las exportaciones (2.390 millones de dólares) y un 12% de la recaudación fiscal (1.377 millones de dólares).