La disposición 59 publicada en el Boletín Oficial de la Dirección Nacional de Control Comercial Agropecuario estableció los pasos que tendrán que cumplir los exportadores de carne para poder concretar un embarque. Esta nueva traba para el comercio generó malestar en los productores.

Las entidades que conforman la Mesa de Enlace: Coninagro, la Sociedad Rural, la Federación Agraria y CRA, mantienen reuniones para definir si las medidas serán con una modalidad presencial o virtual.

Desde el Gobierno sostienen que el objetivo de este nuevo registro es combatir la subfacturación y el cumplimiento del acuerdo con los frigoríficos que ofrece 11 cortes de carne a precios económicos en supermercados.

El gobierno pierde con la inflació y busca con estos gesto intentar frenar las subas del precio de la carne que aumentaron un 65,3% en relación a abril de 2020, según el IPCVA.

El presidente Fernández en su última aparición pública en Argentina dijo: «celebro que los precios internacionales de los commodities crezcan, pero lo que no celebro es que los argentinos paguemos los alimentos como los pagan los que requieren nuestros alimentos«.

«Esta nueva medida está maquillada, le querrán dar otro nombre, pero la verdad es que la autorización de quiénes exportan está en manos del Estado, entonces ¿Cuál es la diferencia con los ROE?», apuntó Jorge Chemes, presidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA).

Por estos cortocircuitos de comunicación, Chemes aclaró: «En estos términos es imposible poder dialogar» y adelantó:  «No nos gusta la metodología de las medidas de fuerza, pero los productores nos piden que visibilicemos de manera urgente las continuas amenazas y por la situación que pasa el campo».