Desde el Senasa reconocieron que causó mucha sorpresa el químico encontrado. Este viernes habrá una videoconferencia de autoridades técnicas del Senasa con sus pares rusos.

Este miércoles retumbó fuerte la noticia de la restricción de importación, que imponía el Servicio Federal de Control Veterinario y Fitosanitario (Rosseljoznadzor), a cinco frigoríficos argentinos al ingreso de carne vacuna. La medida fue tomada por el ente sanitario de ese país por detectar la presencia de ractopamina en carne enviada desde Argentina, un químico que se utiliza para promover el crecimiento de la masa muscular en los animales.

Ante la novedad, fuentes oficiales del Senasa reconocieron que causó mucha sorpresa el químico encontrado. Un veterinario especializado en productos del área, del Servicio sostuvo que es una sustancia que se usa para “inflar” los músculos de los animales (engorde “artificial” y rápido) y que comúnmente es utilizado en porcinos más que en bovinos.

“El animal lo elimina muy rápido de su organismo, no dura más de 12 horas en él. No resulta nociva para el humano, cuando consume la carne. Hay otras sustancias, de la misma familia de la ractopamina,  si son peligrosas y están especialmente prohibidas”, detalla el experto.

Entre las próximas acciones, comentan desde el Servicio, este viernes habrá una videoconferencia de autoridades técnicas del Senasa con sus pares rusos. Como parte de esto, también se involucrará al embajador ante la Federación Rusa, Ricardo Lagorio, muy interesado en que se mantengan en pie los mercados que se lograron habilitar.

Asimismo, se analiza plantear una queja formal ante las exigencias sanitarias pocos consistentes. Como parte de esta acción, también se demandará a los rusos la visita para habilitar otras plantas frigoríficas pendientes de habilitación en Argentina.

Desde el Senasa destacan que se están enviando cientos de contenedores  de carne y que aparezcan problemas puntuales no resulta significativo. Sobre todo, porque la autoridades rusas no descartan extender este veto a todas las importaciones de carne argentina. Finalmente, esto no debería afectar todo el comercio de carne con ese país, afirma desde el Servicio argentino.