Se estableció la restitución del sistema de equivalencias entre los organismos de sanidad.

Así se lo comunicó la Agencia de Inspección de la Sanidad Animal y Vegetal del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (APHIS/USDA) a la Secretaría de Gobierno de Agroindustria de la Nación, a través del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa).

De esta manera, se estableció la restitución del sistema de equivalencias entre ambos organismos, lo que implica que las medidas utilizadas por Argentina para la inocuidad de las carnes bovinas tienen el nivel apropiado de protección sanitaria como las exigidas por el FSIS/USDA, y proporciona la misma protección a sus consumidores.

Según la información oficial, Argentina contará con un beneficio de acceso de una cuota de 20.000 toneladas anuales que representarían de US$ 150 a US$ 180 millones, mientras que las exportaciones que superen ese volumen deberán abonar otro arancel de ingreso del 26,4%.

“Se estima que el 80% del producto a exportar sería carne magra que demanda la industria estadounidense para la producción de hamburguesas y que no es producida en cantidades suficientes por los productores estadounidenses”, detallaron desde Agroindustria, al tiempo que indicaron que “el 20% restante serían cortes de alta calidad, producto premium con características especiales”.

En tanto, Estados Unidos autoriza la importación de todos los cortes de la carcaza, deshuesados, con excepción de la cabeza, pezuñas y menudencias.