El Gobierno nacional oficializó este jueves la reducción permanente de las retenciones a carnes, granos y sus derivados mediante el Decreto 526/2025. Entre los principales cambios, se destaca la baja en la alícuota de soja del 33% al 26%, del maíz del 12% al 9,5% y del girasol del 7,5% al 5,5%. También se redujeron los derechos para la harina y el aceite de soja, del 31% al 24,5%.
Según un informe de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), esta reforma tributaria permitiría un crecimiento del 8% en la producción agrícola hacia 2035, con ingresos adicionales estimados en US$28.800 millones. Proyectan que la producción total alcance las 172,3 millones de toneladas de granos, con un valor de US$50.100 millones.
La Bolsa de Cereales de Buenos Aires también prevé un impacto positivo: estima que en la campaña 2028/29 las exportaciones del agro sumarían 7,6 millones de toneladas más y US$2.695 millones extra.
Además, la medida mejora las condiciones para los productores. Por ejemplo, la probabilidad de cubrir costos en soja subiría del 60,8% al 72,6% con el nuevo esquema de retenciones. En el caso del maíz, la mejora iría del 53,5% al 58,9%.
El Ejecutivo enmarca esta decisión en una estrategia de apertura comercial, buscando incentivar el desarrollo productivo regional, generar empleo y atraer divisas. La medida busca impulsar la producción y las exportaciones agroindustriales