El gobierno de Bolsonaro autorizó en forma permanente la compra de ese cereal sin aranceles a otros países que no sean del Mercosur, siempre que no se supere el tope anual de 750 mil toneladas.
El 1° de diciembre pasado, Bolsonaro publicó un Decreto por el cual el vecino país convirtió en permanente una cuota de importación libre de los aranceles extrazona el Mercosur para 750 mil toneladas anuales de trigo, que es más o menos el 15% de lo que debe importar para cubrir su consumo.
El decreto, que también fue firmado por los ministros de Economía, Paulo Guedes, y de Agricultura, Tereza Cristina Dias, el gobierno de Brasil dispuso que: “Queda restablecida la concesión arancelaria otorgada por la República Federativa de Brasil, en el marco del Acuerdo General de Aranceles Aduaneros y Comerciales (GATT) por un contingente arancelario global mínimo de 750.000 toneladas por año con la tasa del Impuesto de Importación reducido a 0%, para los códigos 1001.19.00 y 1001.99.00 de la Nomenclatura Común del Mercosur”.