El presidente de la Federación de Industrias Frigoríficas Regionales Argentinas (Fifra), Daniel Urcía, expresó que ya mantuvo reuniones con autoridades del Gobierno Nacional.
“La reforma impositiva es necesaria y requiere de un acuerdo de los diferentes estamentos del Estado”, arrancó Urcía en su editorial de enero, donde señaló la necesidad de “apostar al blanqueo del comercio de carne” y controlar la informalidad laboral.
En encuentros con funcionarios del Ministerio de Agricultura y Ganadería y del Senasa, la entidad se enfocó en su reclamo para “corregir la distorsión que genera la aplicación de IVA con alícuota del 21% al servicio de faena“, una discusión que ya lleva tiempo y que generó tensión en noviembre, cuando exportadores se mostraron en contra de una rebaja que la gestión de Macri había implementado.
En ese sentido, desde Fifra explicaron que ese gravamen “castiga al matarife abastecedor”, y adelantaron que se encargarán de poner al tanto también a los legisladores.
Otro de los puntos en los que se buscará avanzar, según difundió Infocampo, tiene que ver con las carnicerías minoristas, para lo cual pedirán una categoría impositiva especial y simplificada, a través de la cual el comerciante pueda abonar en un solo pago tanto impuestos nacionales como municipales y de Ingresos Brutos.
La propuesta es similar a la que el sector le hizo a la gestión anterior, dado que aseguran que con el modelo actual al empresario le resulta “inviable” la recaudación y pago porque las alícuotas “son confiscatorias”, lo que lleva a la evasión.
“Esto aplica para la típica carnicería atendida por su dueño y en la que generalmente colaboran los familiares, y cuyas ventas no superan los 8.000 kilogramos mensuales“, aclararon desde Fifra, al tiempo que excluyeron de la iniciativa a las cadenas de carnicerías o supermercados.
Según explicó la cámara, la situación afecta a más del 70% del universo de comercios minoristas del país.