La Federación Industrial Panaderil bonaerense denunció que los molinos comenzaron a cobrar la harina «a precio dólar», con el tipo de cambio actualizado a la fecha de cobro.

El valor de la bolsa de harina de 50 kilos que compran las panaderías pasó de $230 en febrero de 2018 a $1.500 en la actualidad, por lo que ascendió 552,17% en un año y medio, mientras el precio del pan subió 100% en ese mismo período.

En declaraciones a La 990, el dirigente industrial dijo que hay al menos «cuatro molinos» que ya enviaron facturas a sus clientes con las facturas expresadas en pesos, pero con la «indexación» acorde al precio del billete estadounidense.

Leiras precisó que los molinos envían las facturas expresadas en pesos «con una leyenda que dice que al momento del pago se le va a actualizar el valor según el precio que el dólar tenga en ese momento».

La federación envió una nota a todos los centros de panaderos de la provincia en la que indica que los clientes de los molinos deben pagar las facturas de acuerdo a lo que diga el monto en pesos, sin permitir que les actualicen por el dólar, porque «esa es indexación encubierta e ilegal».

La Federación viene reclamando desde hace dos años que los 6 millones de toneladas de trigo que consume el mercado interno se comercialicen con un precio diferenciado del de exportación, porque una economía pesificada no puede abonar valores dolarizados.

«No podemos permitir que se juegue de esta manera con un producto tan sensible como es el pan, que está en la mesa de todos los argentinos», dijo Leiras, y señaló que el reclamo no es un «capricho» sino que busca la «subsistencia» de miles de puestos de trabajo.

Y agregó: «Estamos levantando la voz porque se está quebrando una industria que debe ser una de las más grandes del país. Estamos reclamando que se controle la clandestinidad, pero ni siquiera eso».