Son dos de las compañías cárnicas más grandes del mundo: las brasileñas BRF y Marfrig, y anunciaron que están en negociaciones para una posible fusión de sus operaciones y de esta manera revolucionaron al negocio frigorífico global.

De concretarse nacería un nuevo gigante en este segmento que cada vez está más concentrado.

La nueva firma cárnica conjunta, según difunde Ámbito.com, alcanzaría una facturación anual de alrededor de u$s19.000 millones, lo que la ubicaría como la segunda más grande de Brasil, apenas detrás de JBS y la cuarta más importante del mundo.

En un comunicado al mercado, BRF y Marfrig afirmaron que sus respectivos consejos de administración aprobaron la firma de un memorando que prevé exclusividad en las negociaciones durante 90 días, prorrogables por otros 30. Durante este período, ninguna de las dos empresas podrá negociar con terceros.

Según la comunicación enviada por ambas firmas a la Bolsa de San Pablo, la combinación de los negocios debe resultar en ganancias de sinergias “operacionales y financieras” y servirá para diversificar el destino de los productos, con relevancia en Brasil, Estados Unidos, América Latina, Oriente Medio y Asia. El actual valor de mercado de BRF es de 23.000 millones de reales (u$s5.750 millones), mientras que el de Marfrig es de 4.000 millones de reales (u$s1.000 millones), lo que resultaría en una nueva empresa valorada en 27.000 millones de reales (u$s6.750 millones), la cuarta de más valor de América del sector.

Justamente estas dos empresas fueron noticia en la Argentina a comienzos de año porque Marfrig compró parte los activos que BRF puso a la venta en la Argentina. Más precisamente se quedó con el frigorífico Quickfood, famoso localmente por su reconocidas hamburguesas Paty. Esta operación fue de suma importancia en el mercado local porque también significó que BRF abandonó completamente su operación en el país y a la par fue un paso importante para que Marfrig tome protagonismo -en aquel momento sólo contaba con una planta de procesamiento en la provincia de San Luis-, pero una década atrás llegó a tener bajo su órbita siete plantas de faena.