Una encuesta de la Universidad Austral reveló que el ánimo de los productores agropecuarios llegó a su punto máximo desde 2020. El 65% consideró que el presidente Javier Milei cumplió con las expectativas del sector, aunque persisten dudas sobre el escenario político posterior a 2027.
El nivel de confianza de los productores agropecuarios alcanzó el máximo de los últimos cinco años tras las elecciones legislativas de octubre, en las que el oficialismo obtuvo un amplio triunfo. Así lo indicó la última edición del Ag Barometer Austral, un relevamiento realizado a 400 productores con un valor bruto de producción igual o superior a los US$200.000, elaborado por el Centro de Agronegocios y Alimentos de la Universidad Austral.
De acuerdo con el informe, existe una evaluación mayoritariamente positiva de la gestión nacional: el 65% de los encuestados considera que el Gobierno cumplió con sus expectativas, un 10% afirma que las superó y un 25% sostiene que estuvieron por debajo de lo esperado.
“Hay una valoración clara del rumbo económico, especialmente en términos de orden fiscal y previsibilidad. Sin embargo, el productor sigue siendo prudente y consciente de que los procesos de estabilización llevan tiempo”, explicó Carlos Steiger, director del Ag Barometer Austral.
El índice general de confianza se ubicó en 159 puntos, lo que representa una suba del 28% respecto de la medición de octubre y marca el valor más alto de toda la serie histórica, superando el récord previo de 158 puntos registrado antes de las PASO de 2019.
El informe destacó que el repunte se explica por una mejora tanto en el Índice de Condiciones Presentes como en el de Expectativas Futuras, que también alcanzaron sus niveles más elevados desde que se realiza el relevamiento. En particular, las condiciones actuales mostraron un incremento del 43%, impulsado por una mejor percepción de la situación financiera de los productores y por un marcado aumento en las expectativas de inversión.
En ese sentido, Steiger subrayó que se observa “un cambio muy relevante” en el ánimo del sector. “La mejora en las condiciones presentes es especialmente significativa porque indica que el optimismo ya no está apoyado únicamente en el futuro, sino también en la percepción del presente”, señaló.
Inversiones con cautela
Uno de los datos más destacados del estudio fue la recuperación del Índice de Expectativas de Inversión en activos fijos, que creció un 53% respecto de la medición anterior y se ubicó en 111 puntos, la segunda mejor marca histórica, solo por detrás de enero de 2022. En este contexto, el 55% de los productores considera que es un buen momento para invertir.
Entre las principales opciones de inversión aparecen la compra de tierras (29%), tractores (27%), hacienda de cría (20%) y hacienda de invernada (19%), además de sembradoras y cosechadoras.
No obstante, el informe aclaró que el optimismo no se traduce de manera inmediata en decisiones concretas: un 38% de los productores, pese a considerar favorable el contexto, no planea invertir en el corto plazo. Las altas tasas de interés siguen siendo el principal obstáculo para avanzar con inversiones en activos fijos, según el 68% de los encuestados, mientras que un 22% mencionó la incertidumbre cambiaria como un factor que desalienta la toma de créditos en dólares.
A pesar del fuerte repunte en la confianza, el relevamiento también reflejó una preocupación latente: el 64% de los productores considera que la posibilidad de un retorno del populismo en 2027 no está descartada, incluso después del resultado de las elecciones legislativas.
En el plano internacional, el optimismo es contundente. El 95% de los productores cree que un Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos sería beneficioso para el complejo agroalimentario, especialmente por su impacto potencial en las exportaciones de carnes y la apertura de nuevos mercados.














