El descenso temporal de las retenciones afectó el mercado de los granos, sin embargo, no se deben ignorar otros elementos que podrían influir en la venta, de acuerdo con un informe de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR).

“Desde el anuncio, en el mercado casi no se ha hablado de nada más que no sea del impacto de la medida en precios y comercialización. Sin embargo, no hay que perder de vista la urgente necesidad de milímetros de agua y el silencioso avance de la chicharrita”, señalaron los analistas Matías Contardi, Bruno Ferrari, Blas Rozadilla y Emilce Terré.

La entidad además indicó que aún resulta “demasiado prematuro para poder apreciar el impacto en la operatoria, cuando inclusive los operadores siguen digiriendo la letra chica del decreto y el pricing de toneladas no termina de arrancar”.

Tras la implementación de la medida, la oleaginosa registró un beneficio semanal de $20.000 y la valoración ascendió a $ 315.000 por tonelada, el precio más elevado desde finales de noviembre considerando el impacto de la inflación.

“Por maíz, se llegó a pagar en torno a los $ 215.000 por tonelada, convalidando el gran momento por la cotización del cereal, que llega a máximos de junio del año pasado, en términos reales. En trigo, la abultada oferta limitó el efecto de la reducción de DEX, pagándose $6000 más por tonelada que durante la semana pasada, tocando de todos modos los valores más altos desde noviembre”, estableció el reporte.