El incremento en los rindes en la región centro superó las expectativas iniciales y el cereal finalizará la campaña con un volumen de 48 millones de toneladas. A precios actuales, este excedente permite divisas adicionales por USD550 millones, que en derechos de exportación representan USD66 millones para el Gobierno.
El viento sopla a favor para el maíz, tras el último informe del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés). El organismo anticipó ayer que aumentará la demanda exportadora y su uso para elaborar etanol, situación que imprimió una tónica alcista en las pizarras en Chicago.
Con este escenario, la posición julio 2021 de maíz aumentó USD3,2 y cerró en USD275,1.
El maíz logró reponerse de la falta de agua en sus períodos críticos de desarrollo y, una vez más, superará a la soja al momento de contabilizar toneladas al final del ciclo agrícola. La proyección del cultivo para este ciclo se ubica por debajo de las 51,5 millones de toneladas, pero muy por encima del promedio de los últimos cinco años.
Según la Bolsa porteña, hasta el momento se cosechó casi el 40% de las 6,3 millones de hectáreas sembradas a nivel nacional.
El dato a tener en cuenta es la mejora en los planteos tardíos y de segunda ocupación en Santa Fe y en Córdoba, claves para esta suba en las proyecciones.
Hasta el momento, los mejores rindes del cereal se pueden ver en las zonas núcleo norte y sur, con rindes promedio de 9.420 y 9.290 kilos por hectárea, respectivamente. La cosecha se ubica en esta región sobre el 90% del área total y el acumulado llega a 4,78 millones de toneladas.
Por su parte, en el centro y norte cordobés se trilló el 20% de la superficie, con un rendimiento que promedió los 8.640 kilos y un volumen de 1,51 millones de toneladas.
Para la soja, la entidad bursátil mantuvo su proyección de 43,5 millones de toneladas, con una campaña que transita la recta final. Los mejores rindes a nivel nacional se obtuvieron en el centro y norte de Córdoba, con un promedio de 3.120 kilos por hectárea. Quedan por cosechar unas 187.000 hectáreas del cultivo, distribuidas en NEA, centro y sur bonaerense y La Pampa.