La Unión Europea (UE) dispuso permitir a los gobiernos del bloque conceder ayudas de hasta 7000 euros a agricultores individuales y hasta 50.000 a pymes del sector, para contrarrestar el impacto de la pandemia.

La normativa será publicada en el Diario Oficial de la UE en los próximos días y entrará entonces en vigor.

En concreto, el reglamento permite a los países del bloque utilizar el dinero que no ha sido utilizado del Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (Feader) para conceder ayudas directas a productores y pequeñas explotaciones afectadas por la crisis del coronavirus.

Así, la ayuda a los agricultores individuales podrá alcanzar los 7.000 euros, lo que se traduce en 2.000 millones más que lo que había planteado originalmente la Comisión Europea. La cuantía máxima para las pymes del sector agroalimentario será de 50.000 millones, en línea con la propuesta de Bruselas.

Los Estados miembros, en cualquier caso, podrán destinar hasta un dos por ciento de sus programas nacionales para desarrollo rural para facilitar esta liquidez de emergencia. Este porcentaje, no obstante, es el doble de lo que preveía el Ejecutivo comunitario.

Por último, las autoridades nacionales podrán efectuar los pagos extraordinarios hasta el 30 de junio de 2021, pero las solicitudes tendrán que ser aprobadas antes de que se acabe este año.

La ayuda a la agricultura europea se confirma en el momento en que muchos países de la UE, para evitar que sus productores y empresas salgan perjudicados, planean exigir estrictas condiciones de producción a las importaciones agroalimentarias procedentes de terceros países.

A través del programa “De la granja a la mesa”, Europa plantea que para 2030 el 25 por ciento de la superficie agraria sea ecológica, y que el uso de fertilizantes se reduzca a menos del 20 por ciento.